Si has llegado hasta aquí abre cada una de las puertas que se te presenten en este blog, explora y déjate llevar.
Si te gusta lo que ves o, mejor dicho, lo que lees, entonces, gracias y si no quieres no vuelvas, pero háblale a alguien de la existencia de este blog. ¡Quién sabe si a ese alguien también le gusta y vuelve!
Estos escritos surgen de una pequeña libreta que me compré de recuerdo en un viaje a Florencia y de algunos artículos publicados en la típica revista de universidad para aficionados, pero también de pensamientos recurrentes que van a ir surgiendo de ahora en adelante.
No prometo una regularidad, pero sí un esfuerzo mayúsculo en tratar de transmitir emociones.
¡Disfruta!